El Club desde sus inicios

Historia

LAUBURU K.E. IBARRA, nace en 1990 desde la ilusión de un grupo de amigos que a través del fútbol sala y la participación en diferentes torneos, deciden practicar este deporte de forma más organizada inscribiéndose en las federaciones que en aquel momento lo regulan y constituyéndose como club en el registro de asociaciones deportivas en 1994. 1994.

El crecimiento en el aspecto deportivo, nos hace alcanzar en breve espacio de tiempo objetivos impensables en el momento de la creación del club, si bien, debemos reconocer un crecimiento desestructurado en las diferentes áreas que debe soportar un proyecto, producto principalmente de la inexperiencia y el desconocimiento.

En la Temporada 93-94 el club asciende a la antigua 1ª A Nacional tras cederle la plaza el Ramón Vizcaino F.S., que por diferentes motivos se ve obligado a renunciar dicha categoría. Un salto deportivo muy grande, ya que el club lo hace desde Segunda Provincial. En esta nueva categoría permanece durante 5 temporadas, peleando las dos últimas por el ascenso a División de Plata, siendo en la Temporada 97-98 cuando se alcanza este gran éxito posicionando al pueblo de Ibarra, con tan solo algo más de 4.000 habitantes, en un referente del Fútbol Sala Provincial y autonómico, arraigando una cultura por nuestro deporte en la comarca, que en años venideros mostraría sus frutos con una importante expansión de practicantes, equipos y clubes.

El sueño Ibartarra duró seis apasionantes temporadas en las que por el polideportivo de Belabieta pasaron jugadores y equipos de inconfundible talento, habilidosos extranjeros, clubes que hoy son un referente internacional como el F.C. Barcelona o Autos Lobelle de Santiago. Estos y muchos otros tuvieron que morder el polvo en Belabieta contra un grupo humano inigualable que sin tanta calidad individual ni desorbitados salarios, pero con unas dosis ilimitadas de humildad y trabajo, conseguían que cientos de aficionados disfrutaran y vibraran cada Sábado con un espectáculo deportivo que muchos recuerdan a día de hoy con añoranza y deseo de que dicha etapa pueda volver a vivirse en la cuna del Fútbol Sala Guipuzcoano en las últimas dos décadas.

En la Temporada 03-04 y tras seis años consecutivos en la categoría, y un brillante octavo puesto (la temporada anterior se luchó por el ascenso hasta la última jornada), la LNFS aprovechando una etapa de crecimiento económico y de nuestro deporte, incrementaba de forma notable los requisitos deportivos para seguir participando en la categoría, entre otros la necesidad de disponer de un aforo total de 2.000 asientos con gradas en los dos laterales de la pista. A pesar de intentar solventar todas estas nuevas exigencias, el club que atravesaba ya por una ajustada situación económica, se vió obligado a renunciar a la categoría descendiendo a 1ª A Nacional en los despachos con el consecuente desencanto interno y social.

Tras unos años difíciles con diferentes problemas burocráticos, otra reestructuración deportiva, en este caso a nivel de reordenación de las diferentes categorías a nivel estatal, lleva al club a Tercera División, cuarto escalafón en el mapa que dibuja las diferentes categorías de nuestro deporte. Años difíciles donde se constituye una nueva junta directiva que tiene como objetivo principal sanear y actualizar la situación de la entidad, intentando salvar o detener la sangría que esta desestructuración estaba provocando en el ámbito deportivo.

Tras 2 años de duro trabajo en las temporadas 11-12 y 12-13, no solo se consigue lo primordial en el ámbito de la gestión que era sanear su economía e imagen, sino que deportivamente el equipo es capaz de alcanzar de forma consecutiva 2 títulos de liga en la tercera división estatal.

Una vez llegados hasta aquí, la pasada temporada 13-14 el club decide ascender de categoría experimentando un nuevo giro de 180 grados en el ámbito de la gestión, una nueva junta directiva de nueve miembros empieza a trabajar en un nuevo proyecto, consiguiendo un exitoso sexto puesto en lo deportivo, pero lo más importante, continuando con el fenomenal trabajo de gestión iniciado hacía dos temporadas y triplicando los recursos del club para afrontar estos nuevos retos.

En la temporada actual 15-16, celebramos el 25 aniversario del club con una serie de actividades principalmente ligadas a este deporte. Tal efeméride es muy importante para el club, tanto porque representa el trabajo realizado por muchas personas desinteresadamente que han hecho llegar a esta situación, así como un punto de inicio para posteriores aniversarios.