El sábado recibimos la visita de un rival directo en Belabieta: el AD San Juan navarro. Siendo viejos conocidos en la categoría, sabíamos que el encuentro iba a estar igualadísimo y que no podríamos despistarnos ni un segundo si queríamos sumar de tres.
Así, comenzamos el choque con Dani, Boli, Uri, Txiki y Oscar como quinteto inicial y, durante los primeros minutos, tuvimos la sensación de que supimos mantener la posesión del balón. Pese a ello, también es cierto que el rival estaba haciendo un buen trabajo para que no pudiéramos finalizar. De ese modo, tuvimos que esperar hasta el minuto 11 de la primera mitad para ver el primer gol de la tarde, cuando Dylan robaba muy cerca del área y se la pasaba a Txiki para meter el esférico en el fondo de la red (1-0). Ponerse por delante fue fundamental. Además, el equipo visitante subió la quinta falta a más de 5 minutos para el final y, pese a que el doble penalti no llegó, a tan solo 14 segundos para escuchar el pitido que anunciaba el descanso, Chuky metía un golazo desde banda al servicio de Oscar (2-0). Irnos a los vestuarios con un margen de dos goles, nos daba fuerza y confianza, pero con los pies en la tierra a sabiendas de que San Juan lo iba a dar todo para intentar puntuar.
De ese modo, comenzamos la segunda parte con Dani, Oscar, Dylan, Txiki y Boli. Como era de esperar, los de Iker Toro comenzaron a hacerse notar cada vez más y, en el minuto 23:30 no perdonaban y reducían distancias: robaban tras aprovechar un mal pase y metían la pelota dentro en un 2×1 al que casi llegó también Txiki para intentar cerrar (2-1). Con ganas de más, el empate llegó a 6 minutos para el final, de nuevo tras robar la pelota y salir rapidísimo en una contra (2-2).
Tras ello, tanto un equipo como otro tuvo varias oportunidades que podrían haber evitado el reparto de puntos, pero el balón terminaba en el poste (también los porteros hicieron una labor fundamental). Con ello, la intensidad subió mucho y cometimos la quinta falta, cosa que no evitó la decisión de intentarlo de 5 a falta de 2 minutos. Sin embargo, el electrónico no se movió más y cerramos el partido con el 2-2. Al final, Jota declaraba que el equipo se había equivocado en la segunda parte, pero que el empate tampoco era malo, aunque nos tiene que servir para aprender que no podemos hacer “lo que el contrario quiere”. Aún así, nuestro míster remarcaba que se sentía “orgulloso a pesar de las dificultades”.
La semana que viene, ¡¡mucho más y mucho mejor!!
GOOOOOAZEN!!!!